Hoy vamos a desarrollar la diferencia entre una amortización industrial y la financiera. Habíamos dicho que la amortización (que ahora la llamarremos industral) es el reconocimiento contable de la pérdida sufrida sobre el valor de las inmovilizaciones que se deprecian con el tiempo.
La amortización financiera reduce, por una parte, el pasivo de la empresa (reembolso de una deuda) y, por la otra, disminuye el activo en una suma equivalente (utilización de las disponibilidades para efectuar el reembolso). Acá la situación en conjunto no cambia: no hay ni ganancia ni pérdida.
Mientras que la amortización industrial reduce solamente el activo de la empresa (disminución de las inmovilizaciones), y esta reducción se opera mediante la reducción de los beneficios ó el aumento de las pérdidas.
Si se contrata un préstamo para financiar un programa de adquisición de bienes (ejemplo: máquinas), con la rentabilidad de estos; el precio de venta de las unidades producidas puede cubrir a la vez:
-
los intereses a pagar a los prestatarios;
-
el reembolso del préstamo contratado; y
-
la amortización industrial de dichos bienes.
Si esto fuera posible, después de los años previstos para el reembolso del préstamo y la amortización de los bienes se tendrán:
Entonces podrá procederse a la renovación de los bienes sin recurrir a un nuevo préstamo o a un aumento del capital social, y la empresa habrá acrecentado su patrimonio por sus propios medios, es decir, por «autofinanciamiento».
Para la próxima nos queda para ver que tipos de préstamos podemos encontrar en el mercado para la compra de maquinarias ó bienes.
Jorge Luis Paulucci
Bibliografía:
Gestión financiera de la empresa. G. Depallens. Editorial La Ley.
Impuesto a las Ganancias de la República Argentina.